Propiedad exclusiva: cada copropietario tiene el derecho exclusivo sobre su unidad. Este derecho garantiza que puedes disfrutar y disponer de tu espacio privado dentro del condominio, siempre respetando las normativas generales.

Uso y goce de bienes comunes: además de tu propiedad, tienes derecho a utilizar los bienes comunes, como jardines, piscinas o salones de eventos. Sin embargo, este uso debe realizarse según lo establecido en el reglamento de copropiedad y sin causar molestias o daños a otros vecinos.

Uso y goce de bienes comunes: además de tu propiedad, tienes derecho a utilizar los bienes comunes, como jardines, piscinas o salones de eventos. Sin embargo, este uso debe realizarse según lo establecido en el reglamento de copropiedad y sin causar molestias o daños a otros vecinos.

Participación en la administración: los copropietarios tienen la facultad de participar en la toma de decisiones del condominio, ya sea en la elección del administrador o la aprobación de presupuestos. Esto te otorga una voz y un voto en las asambleas celebradas y el destino de los fondos comunes.

Acceso a la información: tienes derecho a solicitar información sobre la gestión administrativa y financiera del condominio. Es fundamental que puedas conocer cómo se están utilizando los recursos y los acuerdos que se toman en beneficio de la comunidad.

Pago de gastos comunes: contribuir a tiempo, la cuota asignada, asegura el buen funcionamiento de todo el condominio. Estos aportes permiten que las áreas comunes como jardines, ascensores o piscinas estén siempre en las mejores condiciones.

Cumplimiento del Reglamento de Copropiedad: respetar estas normas es responsabilidad de todos los roles dentro de la gestión de un condominio, no solo para evitar sanciones, sino también para fomentar una buena, respetuosa y ordenada convivencia entre los copropietarios, residentes y trabajadores del condominio.

Mantención de la unidad (departamento o casa): si algo en tu propiedad necesita reparación, como una filtración o un desperfecto, atenderlo a tiempo evitará que esos problemas afecten a los demás.

Respeto entre copropietarios: Vivir en un condominio significa compartir espacios, y para hacerlo de la mejor manera es fundamental el respeto, cumplir con las normas de convivencia y evitar situaciones que generen conflictos es clave para que todos puedan disfrutar de un ambiente tranquilo.

Estipula las responsabilidades de cada copropietario respecto al cuidado de sus unidades y las áreas comunes.

Define los horarios, restricciones y condiciones para utilizar espacios como gimnasios, quinchos y jardines.

Explica cómo se calculan y distribuyen los gastos comunes, así como los plazos de pago.

Indica el procedimiento y las mayorías necesarias para realizar modificaciones al reglamento.

Detalla las sanciones aplicables en caso de incumplimiento de las normas del reglamento.